Avenida de la Constitución hay muchas pero puede que ninguna como la que tenemos en Sevilla. Peatonal desde 2007 (gracias a la instalación del tranvía) y con cantidad de Historia detrás, nos encontramos ante un recorrido que cualquier curioso puede disfrutar de principio a fin. Edificios arquitectónicos únicos, calles en las que han ocurrido hechos que nadie podrá olvidar o comercios de todos los estilos hacen de ella centro turístico de interés.
Desde la Plaza de San Francisco hasta la Puerta de Jerez tenemos todo un camino de anécdotas y escenarios pictóricos que consiguen despertar la ilusión en esas personas que la atraviesan. Hoy, cargada de espacios comerciales y lugares en los que comer, todavía guarda muchos trazos de lo que fue una vez así como la intención con la que se construyó. ¿Te gustaría conocer el por qué de su fama?
¿Cuáles son los orígenes de la Avenida de la Constitución de Sevilla?
Conocer los orígenes de la Avenida de la Constitución de Sevilla no es algo sencillo. La cantidad de transformaciones que ha sufrido y con alguna que otra leyenda que ha caído sobre ella, estamos ante un camino donde el comercio y la política tenían sus bases bien cimentadas. Su nombre, que en la época de la Segunda República era Avenida de la Libertad, surge en 1980 y hasta la fecha como vemos, es el que tenemos.
Dividida en cuatro tramos bien diferenciados, todos ellos tienen su por qué histórico y guardan alguna relación con la acción del momento de entonces. Con cambios casi continuos hasta catorce nombres son los que se han dejado ver sobre las calles y edificios que decoran todo el trayecto. Desde Génova hasta Cánovas del Castillo son muchas las anécdotas que se recogen y que algunos siguen sin valorar.
La Avenida de la Constitución, aunque no lo parezca, tuvo circulación vial desde sus inicios. De hecho, fue aquí donde se colocó el primer semáforo que hubo en Sevilla. Con una media de 21.000 vehículos diarios, en 2007 todo cambia para dar paso al travía que, si vas a la ciudad, verás recorrer de extremo a extremo. El contraste entre lo que se ha vivido aquí y lo que tenemos ahora es el significado real de su esencia.
¿Qué podemos hacer en la Avenida de la Constitución de Sevilla?
Lo que en su día fuese centro político, social y económico de la ciudad se ha convertido en sitio de paso para los sevillanos (o residentes que llevan tiempo aquí) y lugar a tener en cuenta por el turismo. Con la Catedral entre sus dominios las calles se llenan de extranjeros que quieren disfrutar de todo su esplendor. La Avenida de la Constitución se convierte así en ese punto del mapa por el que te preguntan más de una vez. A continuación, te dejamos con algunas cosas que hacer:
Visitar la Catedral de Santa María de la Sede
No podría ser de otra manera. Llegar hasta aquí supone hacer una visita a la Catedral de Santa María de la Sede y es que siendo la más grande de España todos los turistas quedan impresionados con sus vistas. Construida a principios del siglo XV, sobre el solar de una antigua mezquita árabe, nos encontramos ante uno de los edificios más importantes de nuestra Historia y es que la combinación de restos con los nuevos planos no tiene precio.
Archivo de Indias
Declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, el Archivo General de Indias es otra de esas paradas que debemos hacer cuando llegamos a la Avenida de la Constitución. Construida entre 1584 y 1598 como Casa Lonja de Mercaderes con el objetivo de hacer espectáculos cuando llovía puesto que las gradas de la Catedral no estaban cubiertas, ha tenido usos muy diferentes a lo largo de su historia. Finalmente quedó para centralizar toda la documentación de las colonias españolas en América. En 1875 se registra con el nombre que hoy lo conocemos.
Ayuntamiento de Sevilla
El Ayuntamiento de Sevilla, como edificio histórico que es, también merece una visita. Aunque solo sea desde la parte exterior puede que quedes atrapado con su forma. Considerado uno de los monumentos más extraordinarios de España gracias a su estilo arquitectónico, son muchos los turistas que se pasan a verlo.
