El alquiler de viviendas turísticas se ha consolidado como una fuente significativa de ingresos para muchos propietarios en España. Sin embargo, es esencial cumplir con las obligaciones fiscales correspondientes para evitar sanciones y contribuir al desarrollo del sector. A continuación, se detallan aspectos clave sobre la declaración de beneficios por el alquiler de viviendas turísticas.
¿Cómo controla la AEAT el alquiler turístico?
La Agencia Tributaria (AEAT) ha intensificado el control sobre el alquiler turístico mediante diversas medidas:
- Modelo 179: Las plataformas de alquiler vacacional y cualquier intermediario están obligados a informar sobre los ingresos percibidos por los propietarios.
- Inspecciones y vigilancia: La AEAT realiza inspecciones y monitorea la publicidad en internet relacionada con el alquiler turístico para identificar posibles irregularidades.
- Colaboración con plataformas: Se han establecido acuerdos con plataformas de alquiler para obtener información detallada sobre las transacciones realizadas.
¿Qué impuestos debes pagar?
Los ingresos obtenidos del alquiler turístico están sujetos a tributación. Los impuestos principales son:
- IRPF (Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas): Los propietarios deben declarar los beneficios como rendimientos de capital inmobiliario. Si se cuenta con personal contratado a jornada completa, los ingresos se consideran rendimientos de actividades económicas.
- IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido): El alquiler turístico está exento de IVA, ya que se considera una prestación de servicios de alojamiento.
- Impuesto de Actividades Económicas (IAE): Este impuesto solo es aplicable si se facturan más de un millón de euros anuales.
¿Qué podemos deducirnos?
Al igual que en otras actividades económicas, es posible deducir ciertos gastos necesarios para obtener los ingresos:
- Gastos de suministros: Agua, electricidad, gas e internet.
- Impuestos locales: IBI, tasa de basuras y otros impuestos municipales.
- Seguros: Primas de seguros contratadas para cubrir la propiedad y la responsabilidad civil.
- Amortización del inmueble: Porcentaje anual del valor de adquisición del inmueble.
- Gastos de mantenimiento y reparación: Costes asociados al mantenimiento y reparación de la propiedad.
Es importante destacar que solo se pueden deducir los gastos proporcionales al tiempo en que la vivienda estuvo destinada al alquiler turístico.
¿Cómo se declaran los ingresos?
Los ingresos por alquiler turístico se declaran en la declaración anual del IRPF:
- Rendimientos de capital inmobiliario: Si no se cuenta con personal contratado.
- Rendimientos de actividades económicas: Si se cuenta con personal contratado a jornada completa.
Es fundamental llevar un registro detallado de los ingresos y gastos asociados al alquiler turístico para facilitar la declaración y garantizar el cumplimiento de las obligaciones fiscales.
Para obtener información más detallada y actualizada, se recomienda consultar fuentes oficiales o asesorarse con un profesional en materia fiscal.