Cualquiera de las islas que tenemos en Baleares llama a la temporada de verano pero Menorca en otoño, lejos del carácter que le dan sus playas y esa sensación de vacaciones infinitas, tiene mucho por descubrir. Cargada de espacios al aire libre, naturaleza e Historia, nos encontramos con un lugar que sorprende incluso más que cuando descansamos en sus costas. Descrito como un paraíso en la Tierra, cualquiera de sus rincones puede llamar a la libertad y conjunto de emociones. ¿Te gustaría saber por qué el que viene repite?
¿Qué podemos hacer con Menorca en otoño?
Aunque este año está siendo muy conflictivo a razón del coronavirus, debemos destacar todos esos destinos que llaman al entorno natural y en los que podemos disfrutar de aire libre. Menorca en otoño, dejando atrás las playas y el verano, cuenta con muchas cosas de las que podemos disfrutar y sobre las que hay que hablar para que todos sepan de su belleza. Cargado de nostalgia e Historia (solo tenemos que llegar hasta la Naveta de es Tudons para ser conscientes de ello) casi cualquier ruta que hagamos por aquí será una buena aventura:
Visitar la albufera des Grau
Puestos a hablar de espacios al aire libre y donde habrá un distanciamiento social importante, la albufera des Grau es uno de los mejores destinos que nos podemos poner. Cargada de diversidad en lo que a fauna y flora se refiere, si somos amantes de la naturaleza o simplemente queremos conocer un pedazo de esta fantástica reserva del ecosistema, la temporada estival es la mejor para descubrirla con todos sus pasos. Son muchas las personas que vienen hasta aquí para ver esa parte de la isla que sabemos que está pero nunca nos da por investigar. ¿Lo harás ahora?
Pueblos de Menorca
¿Nunca te has planteado salir del centro e ir a visitar los alrededores de la isla? Los pueblos de Menorca guardan un encanto bastante particular que deberíamos conocer por nuestro propio pie. Mahón, villa de San Luís, Alaior o Es Castell son solo algunos de las muchas opciones que tienes para disfrutar de esa otra mirada que define a la isla. Con cantidad de cosas para ver, en otoño además suelen estar algo más sombríos y rodeado de los habitantes del lugar. ¿Se te ocurre mejor momento para venir?
La Menorca Talayótica
En un espacio de tan solo setecientos kilómetros cuadrados encontramos más de 1.500 yacimientos arqueológicos con años de antigüedad. Vendido como el eterno museo al aire libre, Menorca en otoño es la mejor temporada para descubrir todo lo que éste tiene para nosotros. Desde la necrópolis de Calescoves hasta la Naveta de Tundons, son muchos los restos que podemos admirar en la isla y es que para los aficionados éste es el destino con mayor glamour que se pueda conocer.
Turismo deportivo
¿Ganas de salir a correr para ponerte en forma? Menorca cuenta con muchos espacios en los que podemos trazar nuestra propia ruta de carreras para ejercitar el cuerpo. Ahora que el distanciamiento social nos obliga a estar separados de otras personas, es el momento de conectar con la naturaleza que tanto aporta y olvidarse de la claustrofobia que provocan los gimnasios. La oportunidad de conocer rincones de la isla que teníamos en barbecho es uno de los objetivos más apasionantes. ¿No crees?
Paseo por los faros
Los monumentos megalíticos es uno de los atractivos más fuertes de Menorca en otoño pero si buscamos algo más convencional o que no nos traslade hasta nuestros antepasados puede que pasear por los faros de la isla sea una alternativa interesante. Desde el de la isla del Aire hasta el de Cap de Cavallería, la ruta se presenta de lo más fascinante incluso en esta temporada en la que bajan las temperaturas. Si el romanticismo de la playa te motiva en esta temporada puede que aquí encuentres todo lo que andas buscando.
Visitar las galerías de arte
Uno de los secretos mejor guardados de la isla de Menorca son las galerías de arte. Pese a su pequeño tamaño, nos encontramos ante un espacio en el que hay todo tipo de alternativas para disfrutar de obras que nos cuentan cosas. Desde centros de talento local (Antara, Encant, Retxa, etc) hasta talleres de artistas extranjeros que se afincaron aquí, son muchas las opciones que tenemos de descubrir otra característica del lugar que conforme pasa el tiempo, además de estar reconocido, crece por momentos.
¿Es seguro Menorca en otoño con el coronavirus?
La crisis del covid-19 ha cambiado por completo nuestra perspectiva de visitas, reuniones pero sobre todo la manera de hacer turismo. Menorca en otoño, como cualquier otro sitio de España que ahora mismo sobrevive bajo estas circunstancias, cuenta con sus medidas de seguridad a fin de que todos podamos hacer algo de vida externa sin contagiarnos de coronavirus. A pesar de lo que leemos y vemos por todas partes, no estamos en uno de los sitios más desesperados a nivel de infectados y/o fallecidos.
Respetar la distancia social, atender a las medidas sanitarias que se han puesto desde hace meses y controlar cual es la actualidad del lugar en este aspecto es la única manera de hacer turismo seguro. En cualquier caso, si podemos esperarnos a que la situación se estabilice un poco más quizás sea una mejor idea para que no nos pille desprevenidos. La protección empieza por saber cuándo podemos hacer (o no) las cosas y, si sabemos el momento en que se encuentra el país seguramente aplazaremos nuestros planes.
En cualquier caso Menorca en otoño es un paisaje único que debemos ver al menos una vez en la vida. Con todo lo que tiene al aire libre y ese entorno salvaje que va más allá de las playas se puede decir que tenemos la oportunidad de descubrir el terreno de una forma muy diferente pero siempre con la idea de que ya hemos estado aquí y vimos aquello que deja atrapado a todo el mundo. Si eres un apasionado de la naturaleza o simplemente buscas ver este sitio desde otra perspectiva, ¿a qué esperas para hacer tu reserva?