El gobierno de Baleares ha presentado una campaña con la que pretende llamar al turismo internacional para que se acerque a las islas. Bajo el lema Dont Stop Dreaming, nos encontramos con un mensaje de esperanza en el que se ve cómo el archipiélago no ha cambiado y quiere seguir ofreciendo lo mejor a las personas que vienen hasta sus costas. El vídeo, que se presentó la semana pasada en el World Travel Market -en una ronda virtual que se hizo con Londres- ya se ha hecho bastante popular y parece que puede funcionar.
Considerado uno de los mejores destinos para el verano, el archipiélago balear ha notado como la crisis del coronavirus hizo estragos durante los meses de 2020 y ahora, en la medida de lo posible, saca todas sus barajas para que no ocurra lo mismo son el que está por llegar. Si bien es pronto para decir qué es lo que puede ocurrir o no, lo cierto es que poner todo de nuestra parte para sacar partido a los diferentes negocios hosteleros es lo único que nos queda en manos propias. ¿Cuál será el resultado?
¿Qué pretende Dont Stop Dreaming?
Al igual que hace unos meses vimos cómo Ibiza Move Your Spring hacía promoción de todo lo que había en la isla, con Dont Stop Dreaming hay una idea bastante similar y es que se quiere decir al turista las cosas bonitas que hay en Baleares y el por qué no te las puedes perder un año más. Con la posibilidad de venir tanto en invierno como en verano, saber que la temporada pasada se ha perdido sin ningún tipo de alternativa no es algo que haya gustado a los hosteleros pero tampoco a los inversores.
Esta iniciativa, que se ha lanzado con la esperanza de que las islas vuelvan a ser lo que eran antes, habla de las aguas cristalinas de sus playas, de lo magistral que resulta la Catedral de Mallorca de cerca o cómo el poblado talayótico sigue esperando que esos grupos guiados vengan para disfrutar de sus alrededores y de lo que en su día fue una civilización. Cargado de buenas vibraciones, el vídeo estimula al usuario y seguramente le deje con ganas de más para los tiempos que vienen.
El turismo de verano, que ha caído lo suficiente en una temporada que es clave para los ingresos de hostelería, ha despejado sus peores datos y es ahora, antes de las vacaciones de Navidad, cuando debemos comenzar a hacer promoción de aquellas actividades que nos quedan por vivir en 2021 y es que, si todo va bien, el siguiente puede que se convierta en uno de los años más prometedores. Siendo todavía una utopía, interesa hablar de cuáles son las oportunidades que hay a su alrededor y por qué Baleares es un sitio en que vale la pena quedarse.
Turismo en Baleares tras el covid-19, ¿realmente hay futuro?
Los efectos que ha tenido el covid-19 sobre el turismo ha causado mies de dudas a las empresas. Son muchos los negocios que, después de tener que cerrar durante toda la temporada, finalmente no han podido soportar la presión y vieron la forma en la que sus ilusiones y todo lo puesto sobre comercios se fue directamente a pique. Esto, que ha sido una desgracia mundial, ha afectado notablemente en todo Baleares. Sus islas, que se destacan por las reservas de playa, fiesta y todo lo relacionado con el movimiento, han hecho estragos por todas partes.
La periodista Jen Rose Smith, hizo un reportaje para la versión inglesa de la National Geographic donde plantea un turismo mucho más sostenible o que se decante por los espacios abiertos. Alejados de las masas que hemos visto en los últimos años, se hace probable que haya una recuperación pausada pero optimista de lo que se venía viendo tiempo atrás. La citada balearización, habla del consumo fuera de control y de las ganancias a corto plazo que hemos visto de forma consecutiva todo este tiempo.
Si pensamos que tan solo en el verano de 2019 tuvimos 11,8 millones de visitantes en las islas, nos daremos cuenta de que hay una sobresaturación que no está beneficiando a ninguno de nosotros. La dureza del coronavirus, algo que nadie esperaba, ha hecho que las cifras caigan en picado y que sean muchos los sitios que han tenido que cerrar incluso cuando había un pronóstico real de alargar la fiesta (las discotecas de Ibiza iban a ampliar su horario hasta las 12:00 de la mañana, por ejemplo) para que el disfrute fuese mayor. ¿Qué será lo que ocurra ahora?
Dont Stop Dreaming, un canto a la esperanza
Baleares es un paraíso que va más allá de sus playas y la fiesta. Si bien cuando hacemos un sondeo de lo que buscan los extranjeros en verano damos con este tipo de contenido, hacer campaña para ver el otro lado de las islas es un mensaje positivo que no debemos ignorar. Dont Stop Dreaming habla de la costa, de esas aguas cristalinas y de la cantidad de locales en la arena que nos pueden hacer disfrutar de unas vacaciones únicas pero también del deporte, de la montaña, de conectar con la naturaleza y alejarnos de las masas que tanto colapso causan.
El vídeo, hecho con mucho cariño, se ha presentado en la World Travel Market de forma telemática y, tratando hacer conciencia, ha conseguido captar la atención de cantidad de empresarios extranjeros y con ello suponemos que también muchos viajeros que en un futuro querrán venir a conocer las islas o, si ya han estado, repetir aquella experiencia. Con la garantía de que se está haciendo lo posible para que 2021 sea un año cargado de sorpresas y buenas vibraciones en todos los sentidos, esta es una iniciativa de lo más motivadora:
